miércoles, 8 de julio de 2009

¡NO TEMAS!

La Palabra de Dios recoge que el Señor dijo en 365 ocasiones: ¡No temas! ¡No tengas miedo! Es curioso el dato, ya que coincide con los días que normalmente tiene un año natural. Es como si nos lo quisiera decir cada día del año y cada año de nuestra vida.

"No estéis, pues, preocupados y preguntándoos: ¿Qué vamos a comer? o ¿Qué vamos a beber? o ¿Con qué nos vamos a vestir? Los que no conocen a Dios se preocupan por todas esas cosas" (Mt 6,31-32). Estas palabras de Jesús deberían tocar nuestro corazón, ya que nos muestran que la preocupación por nuestro trabajo, nuestra familia y nuestro futuro es la manera de vivir de los paganos y la actitud de aquellos que no conocen a Dios como un Padre celestial. No es suficiente conocer a Dios como el Creador y el Todopoderoso; Él también desea que le conozcamos como nuestro Padre celestial, lleno de amor, que cuida de sus hijos. "Pero vosotros tenéis un Padre celestial que ya sabe que tenéis necesidad de todas esas cosas" (versículo 32).

"No estéis, pues, preocupados por el día de mañana" (versículo 34). Con estas palabras tan claras, Jesús nos está diciendo que no cedamos ni un solo pensamiento a lo que pueda suceder mañana. Nosotros no podemos cambiar nada y no podemos ayudar en nada con la preocupación. Cuando lo hacemos, estamos actuando como los que no conocen a Dios.

"Buscad primeramente el Reino de Dios y su justicia, y todas esas cosas se os darán por añadidura" (versículo 33). En otras palabras, debemos seguir amando a Dios y continuar hacia adelante, descansando en su fidelidad, ya que Él se encarga de suplir las cosas esenciales de nuestra vida.

Las aves cantan, mientras nosotros nos quejamos y hablamos de temores y ansiedades. Los lirios del campo muestran erguidos su esplendor, mientras nosotros nos marchitamos y nos doblamos ante el viento más pequeño de adversidad. ¿No creemos, de verdad, en Aquel que nos ama y nos ha dicho que conoce todas nuestras necesidades? ¿No creemos que Aquel que alimenta a los pájaros y viste a las plantas, nos alimentará y vestirá también a nosotros? ¿Cómo podemos angustiarnos y preocuparnos cuando sabemos que Dios tiene todo el poder, toda la riqueza y es Señor de todo lo que ha creado? ¿Cómo podemos siquiera pensar que nos abandona, como si no fuese fiel a su Palabra?

No importa lo que suceda con la economía mundial, no importa la crisis que vayamos a enfrentar, no importa lo que se pueda cruzar en nuestro camino; nuestro buen Dios nos está guiando y está cuidando de nosotros en cada paso que damos. Nos demanda que confiemos en Él en tiempos difíciles ya que nuestra incredulidad le entristece y nos cierra la puerta a sus bendiciones. Mientras la situación se va haciendo más difícil y los problemas son peores, nosotros nos volvemos más fuertes en el poder del Espíritu Santo porque sabemos que Dios nunca nos ha fallado y nunca nos fallará. Él es siempre fiel, ¡no temas!

"Altísimo Señor, ¡qué bueno es darte gracias y cantar himnos en tu honor!
Anunciar por la mañana y por la noche tu gran amor y fidelidad"
(Salmo 92,1-2)